Como bien se sabe, muchas veces se come con la vista, por lo que unas buenas fotos pueden vender el producto. Además, que aunque tengamos una web, o queramos montarla, si no tienes buenas fotos bajaría mucho la calidad general.
A través de las fotos conoce el comprador tu artículo y se puede hacer una idea de lo que vendes. Es importantísimo preocuparse tanto de la elaboración de tus creaciones, como las fotos que le hagas.
Antes de ponernos hacer fotos, os pregunto ¿Cual es el objetivo de las fotografías en una tienda online? Está claro, aumentar mis ventas, quiere decir, cuando una persona vea la fotografía, que compre o se interese por mi producto. Para ello debe de cumplir las siguientes características:
Despertar el interés de la compra
Esto quiere decir, que los productos deben de estar en perfectas condiciones cuando son fotografiados (además que realmente sea el producto que vendes). Tenemos que hacer nuestro producto lo más deseable posible en el momento de la foto.
Reducir la distancia entre el producto y el comprador
Los compradores habitualmente están acostumbrado a tocar los productos que compran a tener una cercanía a ello, por lo que una falta de confianza reduce las ventas en una tienda online. Para evitarlo, trabajaremos con fotografías que hagan el producto lo más cercano posible. Debe parecer que está al alcance de la mano del cliente.
Aportar información del producto
O en otras palabras, hacer fotografía al producto desde diferentes ángulos, o puntos de vistas. Esto hará que donde no llega el léxico llega la foto. Además sería también interesante mostrar el paquete (si se diera el caso) del producto, así el cliente estará más tranquilo de cómo llegará su producto.
Diferenciarnos de la competencia
Un cliente de tienda online tiende a acudir en primer lugar donde se le aporta más información. Por ello, disponer de fotografías propias y de calidad marcan la diferencia entre nuestra tienda online y la competencia.
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